Corría el año 2014, yo acababa de empezar la carrera de Estudios Ingleses y estaba dando mi primera asignatura de lengua inglesa de la carrera. Tenía un B2 de inglés y da las gracias, así que las clases las necesitaba. En mi carrera las asignaturas de lengua son, en esencia, prácticas del examen de Cambridge y nada más. Considérate afortunado/a si no sabes lo que son. Por suerte, mi profesora era (y sigue siendo) la hostia de persona, se pasaba la la guía docente y los exámenes de Cambridge por el forro y hacíamos cosas que como profesional del lenguaje solo puedo calificar como GUAYS. Entre ellas, ver capítulos de The IT Crowd, una serie de informáticos británicos que era mala como la droga pero enganchaba de la misma forma; o ensayos sobre temas interesantes (LAS PRINCESAS DISNEY) y posterior presentación en grupos; o esto que os traigo hoy. El análisis DAFO.
La actividad que nos mandó hacer esta señora era realizar nuestro propio análisis DAFO en vídeo con un programa llamado PowToon (si sois negados con lo audiovisual como yo y por alguna cosa de la vida tenéis que hacer un vídeo, os lo recomiendo). Luego teníamos que compartirlo con el resto del grupo, lo cual me dio La Vergüenza porque hablar públicamente de tus sueños siempre da como un poco de cosilla, ¿no? Pero lo hice, hablé de ello, y qué descubrimiento, oye.
Pero un momento, ¿qué narices es el análisis DAFO? Pues a ver, originalmente es una herramienta de estudio de empresas que mide las debilidades, amenazas, fortalezas y las oportunidades de la misma (de ahí el nombre). Yo no sé nada de cosas de empresa así que eso me lo voy a ahorrar (me dejé las matemáticas en 4º de la ESO) pero sí creo que toda carrera escritoril tiene un poquitín de empresa, así que nos lo podemos llevar al terreno de lo literario. Y de hecho, de eso trata el post.
Análisis DAFO para escritores.
Recapitulemos. Hemos dicho que el DAFO ese mide tus debilidades, tus amenazas, tus fortalezas y tus oportunidades, ¿verdad? Genial, ¿pero a qué me refiero exactamente con eso? Consiste en hacer un análisis externo (amenazas y oportunidades) e interno (fortalezas y debilidades) de la situación en la que te encuentras como escritor o escritora, de manera que obtengas una visión global del asunto y puedas saber por dónde tienes que tirar en los próximos años.
Mi primer análisis DAFO escritoril lo hice en 2016, en un bloc de dibujo y con muchos colores que me quedó ideal, y además, me sirvió para enfocar de manera general, aunque vaga, la situación en la que estaba y cómo podía enfocar los próximos años. Me fue extremadamente útil, y ahora que lo miro con un poco de retrospectiva creo que di con la clave de lo que tenía que hacer para mejorar como escritor. Pongo como ejemplo algunas cosas que puse ese 2016 como eso, meros ejemplos. Vuestro análisis y el mío serán totalmente distintos (aunque seguro que coincidimos en algo).
También añado: este análisis es bastante personal, y cada uno lo puede enfocar de manera muy diferente dependiendo de muchos factores. Es, sobre todo, un trabajo de autocrítica, tanto de lo positivo como de lo negativo. Solo vosotros/as, o alguien que os conozca muy bien, sois quienes tenéis que escribir vuestro propio análisis. Y es importante que seáis honestos con vosotros/as mismos/as, insisto: tanto en lo malo, como en lo bueno. Que esto, al fin y al cabo, consiste en eliminar lo negativo y fomentar lo positivo.
En fin, vamos paso a paso:
🔼 Debilidades.
La palabra habla por si sola. Lo que falla, lo que no funciona, en lo que flaqueas. ¿Cuáles son las debilidades de tu proyecto? Si hablamos de proyecto de escritor, ¿cuáles son tus debilidades como escritor(a) profesional? ¿te distraes fácilmente? ¿crees que todo lo que escribes es una basura? Se trata de encontrar todas las cosas que crees que no funcionan y atacarlas en la medida de lo posible.
En el DAFO que hice en 2016 puse: pereza, falta de confianza, mala organización y miedo. Podríamos hablar largo y tendido sobre estos factores, que, creo yo, son bastante extendidos entre la comunidad escritoril. Cómo solucionarlos, realmente, no tengo la más mínima idea, sobre todo porque la situación de cada uno/a será diferente. En mi caso, traté de trabajar más, organizarme mejor, confiar más en mi mismo y no preocuparme tanto por lo que puede ir mal. No es fácil en absoluto, pero la recompensa merece la pena.
🔼 Amenazas.
¿Qué amenaza tu proyecto? ¿Qué cosas te impiden que no puedas sentarte en la silla a escribir unas cuantas palabras? Un trabajo nutricional que te da comer puede ser una amenaza, o un perro especialmente llorica, o tener de vecino a un ogro cantante de ópera, por ejemplo.
En mi caso, puse: distracciones (internet), responsabilidades (estudios) y comida (tengo que comer, de escribir no se vive). Son amenazas bastante factibles, creo que todos podríamos compartirlas: Internet es un arma de doble filo, porque me permite estar aquí hablando contigo pero también me lleva a ver el canal en directo de OT durante dos horas y media; uno tiene que estudiar porque hay que sacarse la carrera y… hay que trabajar en algo «tradicional» porque dicen las malas lenguas que de escribir no se vive (o eso dicen).
Amenazas, en realidad, pueden ser las mismas para todos. Porque todos/as estamos metidos/as en este mundillo y sabemos lo complicado que es.
🔼 Fortalezas.
Ahora viene lo bueno, lo positivo, y para mí, lo más difícil. No sé si os pasa a vosotros, pero a mí siempre me resulta más fácil hablar de mis debilidades y amenazas que de mis fortalezas. Podríamos hablar de las inseguridades de la profesión, pero eso ya lo han hecho otras personas mucho mejor que yo.
En cualquier caso, hay que hacer un esfuerzo por mirarse a un espejo y tratar de ver las cosas que hacemos bien. Es importante. ¿Cuáles son tus puntos fuertes como escritor? ¿A qué crees que le puedes sacar partido? Es importante tratar de encontrar nuestros fortes y explotarlos, aunque como todo, sea más fácil decirlo que hacerlo.
En mi caso, puse: estudios de filología y dominio del inglés. Lo primero me ha venido bien para tener una perspectiva más crítica de lo que leo (y que me ha permitido escribir posts como estos) además de conocer la tradición literaria; y lo segundo, para estar seguirles la pista a escritores y blogueros/as de lengua inglesa, que nunca está de más (de esto sí hablaremos otro día).
🔼 Oportunidades.
Esta es fácil y como las amenazas, la que más podemos compartir. Mis oportunidades como escritor se pueden parecer mucho a las vuestras. ¿Qué cosas saltan en tu camino que pueden ayudarte en tu empresa? ¿En qué trenes te tienes que subir? Patreon es una buena oportunidad para conseguir dinerillo creando (y personas como Alicia Pérez Gil o Rocío Vega se están llevando mis dineros todos los meses), si escribes fantasía o ciencia ficción, las convocatorias de la revista Windumanoth, o los bingos de La maldición del escritor (donde recopilan relatos mes a mes) pueden ser buenas oportunidades para ti.
Lo que yo puse fue este blog, el nanowrimo, cursos de escritura y convocatorias de concursos. Pero en realidad podría extenderme muchísimo. El mundo está lleno de oportunidades, y más gracias al internet este. Todo depende de la situación en que te encuentres y de como puedes sacar partido de ellas.
🔼 Y las conclusiones.
Ya tienes, a golpe de vista, un análisis general de la situación en la que te encuentras como escritor/a. Ahora te toca a ti sacar tus conclusiones. ¿Cómo puedes atacar a tus debilidades? ¿Cómo sacarle partido a tus fortalezas? ¿Qué oportunidades puedes aprovechar y cómo? ¿Cómo hacer que las amenazas no te afecten? En definitiva, ¿cómo puedes mejorar como escritor/a? La respuesta a estas preguntas serán tus conclusiones, y una buena guía de por dónde tienes que tirar próximamente.
Las mías fueron que tenía que trabajar más, organizarme mejor, distraerme menos, confiar más en mi mismo y aprovechar las oportunidades que se me presentaban (como este blog).
Por supuesto, y de nuevo: es más fácil decirlo que hacerlo, y a veces las amenazas y las debilidades son más fuertes que nuestras fortalezas y oportunidades. A veces fallamos y se nos va todo a la mierda y no podemos hacer nada por evitarlo. Pero bueno. Siempre podemos levantarnos y seguir escribiendo, que al final, es lo único que importa.